El término lo acuñó Carlo Petrini en 1986 en Italia, para poco después asignarse a un movimiento internacional que se contrapone a la estandarización del gusto en la gastronomía y promueve la difusión de una nueva filosofía para combinar conocimientos y placer. En 2004, la FAO reconoció oficialmente al Slow Food como una organización sin ánimo de lucro e inició una relación de colaboración con ella. Desde ese momento el fenómeno Slow Food ha crecido hasta superar los 100.000 asociados en más de 160 países y sus objetivos se siguen ampliando más allá del simple disfrute de la comida. Desde el principio los dirigentes de este movimiento han querido ir un paso más allá e implicarse en acciones de responsabilidad social y concientización, y han promovido el consumo de alimentos orgánicos. Sus esfuerzos van hacia la defensa de la biodiversidad, un consumo sostenible y…

Por Lorena Carreño* El corcho sigue siendo el tapón favorito por excelencia, los vinos del viejo mundo lo prefieren y en América las grandes vinícolas lo colocan en sus caldos como un verdadero valor agregado. Es ligero, elástico, compreso con gran capacidad de recuperación, adherente con alto coeficiente de fricción, impermeable a los líquidos y gases, aislante térmico porque es difícil que arda, químicamente inerte ya que raramente se pudre, y podría seguir describiendo sus beneficios. Los problemas que puede suponer el corcho para la calidad del vino provienen de elementos externos, como una contaminación bacteriológica o un tratamiento con productos agresivos. Se dice que los “vinos de calidad” tienen tapones de corcho naturales, eso que los franceses llaman ´très fin´ –muy fino- y es lo que les permite envejecer apropiadamente, recuerde que el tema de vino, es el tema del ritual y esa…