Prácticamente la totalidad de veces que consumimos vino lo hacemos con comida y platos típicos: hablamos entonces de MARIDAJE DE VINO. Esto nos aporta dos ideas claras: la primera que vino y comida van bien juntos, la segunda que hay millones y millones de combinaciones posibles entre las que elegir. Como es lógico, alguna de estas combinaciones serán magníficas, otras no tanto, y muchas otras, igualmente, no serán adecuadas. Reglas básicas de maridaje a tener en cuenta Por fortuna para el consumidor, la combinación de vino y comida no es cuestión arbitraria, sino que hay unas reglas de maridaje de vino y comida. Pero por desgracia para el consumidor, realizar la combinación adecuada no siempre es fácil. Una comida, al degustarla, nos aporta unos sabores que la definen y a partir de los cuales somos capaces de describirla: es salada, dulce, amarga o agria…