Generalmente por estos días ya estamos corriendo con todos los regalos que nos faltan y muy apresurados comprando todo para la cena de navidad. Elegir un vino nunca es tarea fácil porque obviamente queremos que todo quede perfecto y generalmente nos cuesta trabajo decidirnos por un vino específico para la cena. Hoy les tengo la solución, el vino rosado es una opción muy buena para esta navidad, funciona muy bien con los romeritos en mole, el pavo en salsa de arándano o algunas versiones de lomo en salsas ligeras, como al vino blanco. Si ustedes van a comer el pavo con gravy o el lomo en una salsa mucho más condimentada, les aconsejo que opten por un tinto de baja astringencia. Elegir un vino alto en alcohol y de uva Cabernet Sauvignon o Shiraz, no suele ser buena idea con carnes tan sutiles como…
El maridaje es el arte de combinar los alimentos con las bebidas, en este caso con los vinos. En el maridaje es indispensable tener armonía entre los sabores de la bebida y los de la comida. También la textura y el aroma de los platillos tienen que ver con la decisión de cuál vino elegir para acompañar a los alimentos. Por contraste: La intensidad de los sabores del vino y de los alimentos es distinta. Un buen contraste permite resaltar uno de los dos o enfrentarlos, si es que ambos tienen mucho carácter. Por complemento: Los sabores del vino y de los alimentos son parecidos, por lo tanto se refuerza la gama de ambos sabores. Por ejemplo, un alimento suave intensifica el sabor de un vino suave y viceversa.
Prácticamente la totalidad de veces que consumimos vino lo hacemos con comida y platos típicos: hablamos entonces de MARIDAJE DE VINO. Esto nos aporta dos ideas claras: la primera que vino y comida van bien juntos, la segunda que hay millones y millones de combinaciones posibles entre las que elegir. Como es lógico, alguna de estas combinaciones serán magníficas, otras no tanto, y muchas otras, igualmente, no serán adecuadas. Reglas básicas de maridaje a tener en cuenta Por fortuna para el consumidor, la combinación de vino y comida no es cuestión arbitraria, sino que hay unas reglas de maridaje de vino y comida. Pero por desgracia para el consumidor, realizar la combinación adecuada no siempre es fácil. Una comida, al degustarla, nos aporta unos sabores que la definen y a partir de los cuales somos capaces de describirla: es salada, dulce, amarga o agria…