R.CABEZAS
El concejal Carlos González Jariego ha anunciado que desde el ayuntamiento se estudia organizar una gran fiesta en torno al vino que podría celebrarse de manera anual durante todas las primaveras y que sustituiría al Iberovinac enfocado al enoturismo que, en un principio, se había programado en noviembre durante los años impares.
La idea ha surgido tras la reunión del equipo de gobierno con más de una veintena de empresarios del sector que consideran que el enoturismo es una herramienta positiva para dar a conocer y promover sus negocios, pero quizá con un enfoque distinto al planteado en el Iberovinac pasado. Durante estos días se están ultimando los detalles y, aunque no es oficial, podría llamarse la Fiesta Ibérica del Vino.
El objetivo es implantarla de manera anual con duración de uno o dos días. El lugar está por decidir, aunque Carlos González avanzó que podría ser la plaza de toros, donde ya se han celebrado eventos con éxito en torno a los caldos. La fiesta estaría orientada al público en general y a la misma acudirían expositores de fuera. De esta manera, Iberovinac se celebrará de modo definitivo a cada dos años, siempre con el carácter profesional para importadores que le ha definido. Seguirá siendo en noviembre y durante los años pares.